Si alguna vez te han recetado un antipsicótico como Haldol y te ha surgido temblor, rigidez o movimientos involuntarios, lo más probable es que estés experimentando efectos extrapiramidales. No es algo raro; es una reacción que ocurre cuando ciertos fármacos alteran la dopamina en el cerebro. Lo bueno es que, con la información adecuada, puedes reconocerlos a tiempo y actuar.
Los síntomas se dividen en cuatro grupos que aparecen de forma gradual o súbita:
Estos efectos pueden aparecer con cualquier antipsicótico típico, como el haloperidol (Haldol), pero también con algunos antidepresivos o antieméticos que bloquean la dopamina.
La mejor estrategia es la prevención. Cuando empieces un tratamiento nuevo, pide a tu médico que te explique la dosis mínima eficaz y que te haga revisiones frecuentes. Si notas cualquier signo, no esperes a que empeore.
Algunos trucos que suelen ayudar:
Recuerda que nunca debes dejar de tomar el medicamento sin consultar; la retirada brusca puede empeorar los síntomas.
En caso de duda, escribe una lista de los efectos que notas y compártela con tu profesional de salud. Cuanto más preciso seas, más rápido podrán ajustar el tratamiento.
Los efectos extrapiramidales pueden ser molestos, pero con vigilancia y una buena comunicación con tu equipo médico son manejables. Mantente atento, pregunta siempre que algo te parezca raro y sigue las recomendaciones para que tu tratamiento te ayude sin causarte problemas innecesarios.
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